martes, 30 de mayo de 2017

Fenómenos


Estoy convencida de que soy protagonista de un fenómeno que tiene que ver con una disfunción en el paso del tiempo. Si bien inicié mi carrera cronológica en el mismo momento que mis coetáneos, en algún punto ellos fueron arrastrados por el devenir de la decrepitud, mientras yo, sin duda, he sido olvidada por alguna década. Esta observación que puede parecer subjetiva se comprueba fácilmente en reuniones de ex alumnos, ex combatientes o reencuentros de veteranos. Claramente aquellos que acusan mi edad se ven mayores y no veo a nadie que, como yo, haya esquivado con tanta eficacia la senilidad. Ellos me miran con asombro y estoy segura que deben preguntarse sobre mi condición. Yo tampoco dejo de cuestionarme porqué los demás envejecen y uno no.

No hay comentarios:

Publicar un comentario